Sólo fue una vez. Pero me enganchó.
No veo el momento de volver a subirme en una de esas cabras
locas e intentar pilotarla.
Mi primera vez, la moto hizo conmigo lo que quiso hasta que
se cansó y me tiró al suelo en un mini salto y me fastidió dos costillas (solo
contusión, pero me duró el dolor dos semanas).
¡Quiero ponerme de barro y tierra hasta arriba!.
Entiendo a la perfección a los del enduro/cross. Este
polvo/tierra engancha de verdad, 100% adictivo.
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