Algunos moteros creen que ligan por la moto que llevan y porque a las féminas les atrae la imagen de libertad y juventud que se supone que desprende este vehículo.
Puede ser, la moto llama la atención, se ve y se deja ver.
Una vez que el motero ha ligado y el ligue ha pasado a novia, esa imagen de libertad y juventud seguirá acompañándole mientras que su media naranja disfrute de las excursiones moteras románticas en pareja (excursiones que tú jamás habrías pensado ir porque no hay ni una sola curva en todo el camino).
En este estado la moto se ve y se disfruta. Es el momento en el que el motero-alfa duda entre: Compra de moto de turismo para que ella vaya como en un sofá o bien, ornamentar la moto como se pueda para hacerla más cómoda para los viajes y no renunciar a alguna salida de curvas con amiguetes de vez en cuando.
Si del estadio noviazgo se pasa a la fase pareja/matrimonio con bebés la moto se ve, se huele y se oye. En mi caso, me decidí por las motos deportivas porque con bebés en época de crianza, lactancia, etc no ibamos a estar de excursiones. De modo que la moto se seguía viendo, pero de otro modo, menos romántico y con otro concepto de libertad y juventud. Es entonces cuando empieza la guerra de las dos leonas heridas, moto vs mujer/bebés. El toma y daca constante que hace a la moto más visible de lo que lo va a estar nunca. Intentad disimularla todo lo posible en esta época.
Se ve porque cuando consigues salir un sábado con los amigos tras tres meses sin arrancarla te dicen: ¿Te vas con la motito? ¡Aquí me quedo yo encerrada sin libertad con los niños!. Ya no eres ningún jovencito para estar con la motito todo el día (el tema diminutivos escuece de lo lindo)
Se huele porque antes los juegos de ruedas guardados en el trastero no molestaban y ahora huelen y apestan el trastero; y sin embargo para ti huelen al mejor de los perfumes.
Y se oye: Se oye porque oir es lo único que harás cuando sea sábado y oigas por la ventana sonido de motos que salen a rutear. O cuando haya GGPP por la TV. Estarás cambiando pañales y oyendo las motos porque verlas...
Si has conseguido pasar este duro trance sin vender la moto y sin que te hayan puesto las maletas en la puerta de casa, observarás que la moto ha pasado a ser invisible. Por lo menos en mi caso.
El otro día dejé mi fabulosa Aprilia Tuono (una moto italiana, se huele, se ve y se siente, pura pasión) en Corsa Motos para hacer la revisión. Federico, amablemente me dejó su Kymco GrandDink 125 y la dejé en el garaje aparcada dos días al lado del coche de la familia.
Vamos a ver, no tengo nada en contra del scooter (que me entiendan los usuarios de GrandDink), pero la de Corsa Motos estaba sucia (había llovido), lleva el cofre trasero, es un scooter y ¡no es una Tuono maldita sea!.
Lo único que tienen en común son el número de ruedas y que tienen cierto tono grisaceo.
Pues fijad hasta que punto ha llegado la invisibilidad de la moto para mi mujer que, bajando dos días al coche y teniéndola que mirar para salir y para entrar por si la roza, le pregunto: ¿Has visto el scooter de Fede?.
- ¿Que scooter?
- ¿Que scooter?. El que está aparcado que lleva hasta cofre-le digo yo.
- Uyss, ya decía yo, la veía rara y no sabía por que.
¡¡¡¡¡¡¡!!!!!!!. ¿Cómo?. Me sentó peor que si se metiera con mi tripa de padre. ¿Confundir una Tuono con un GrandDink?. Brrrrrr.
Por eso, mis motos siempre llevan tapa colín monoplaza, je. ¿Que haría yo ahora con una moto turismo en mi garaje?.
Visto lo del error del scooter, siendo motera como es, sabiendo que lo merece por aguantarme las rodadas circuiteras, las manos llenas de grasa, los domingos sin salir de casa cuando hay GGPP/SBK y la principal: ¡Porque la quiero!, creo que ha llegado el momento de intentar ligarme de nuevo a mi mujer con la moto, que quiera "ver" la moto.
Así que montaré el sillín del pasajero e iremos a excursiones románticas por carreteras que jamás pensé ir.
(A pesar de que tenga que cambiar los reglajes de suspensión y me deje las ruedas cuadradas en esas rutas sin curvas...)
TQ
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